Catorcedeenerodedosmildiez

Mientras me hablabas.
Y yo te miraba.
Se detuvo el tiempo en un instante.
El amor me llamaba y yo le obedecía.
Mientras me susurrabas palabras al oído.
Y yo te amaba con locura.
Se alzaron los sentimientos. Aquellos que yo tenía ocultos.
Mandó tu voz. Una sola palabra tuya, para saber que me amabas.
El cielo que hizo visible en tus ojos. El paraíso perfecto.
Y yo pronuncié el querer en tus labios.

30 de agosto de 2010

Una espina en el corazón es dolorosa. Si lo sabré yo.
Un vacío tan profundo y solitario.
Difícil de llenar por más que pase el tiempo.
Debemos entender, que no somos fuertes.
Somos tan débiles como una flor. Marchitándonos una y otra vez a causa de un amor.
Mis lágrimas, entremezcladas con el aroma de tu cuerpo caerán en ese abismo vacío.
Donde antes estaba mi corazón.
Un vacío tan negro como la noche en que te fuiste y me lo robaste.
Para este entonces, ya habrá perdido su color rojo pasión. Como controlar algo que ya no es mío.
Maldito el día en que te dije que sí.
En el que te vi y en el que te sonreí.
Pero las cosas hechas, hechas están.
No puedo cambiar el tiempo, que pasa y pasa sin ningún enredo.
Hasta que finalmente decida rendirme. Decir basta. No luchar más. Y será por ti.
Mis amigos preguntarán ¿Estás bien? ¿Por qué tan triste?
Y yo solo me dedicaré a sonreír, esa sonrisa que dice “Estoy bien, gracias”. Como siempre lo hice.
Como tú me viste el día en que te conocí.
Mi pequeño ángel. El que se marcho con mi corazón.
Tu mismo fuiste el que clavo esa espina.
Condenándome.
Y no te molestes en pedir perdón.
Porque sabes que te perdonaré. Y luego lloraré como nunca habré llorado.
Me has dejado, te marchaste para nunca más volver.
Pero una sola cosa mas diré. Te quiero.

Y así será

Y así, voy a saber que ya no estás.
Y así será no te preocupes.
Y será que a mí no me queres más.
Será que a mí también me da igual.
Será que a mí no me va tan mal porque hay motivos y razones para no aguantar.
Será tan fácil poderte olvidar.
Será tan fácil como respirar.
Será que ahora te pido que ya no vuelvas.
Y así voy a aprender a no llamar por tu nombre al amor.
Será que vos no te das cuenta que fuiste una luz.
Y ahora sé que vos no serás el que destruya los días y ponga en peligro la historia, las risas, el tiempo, lo nuestro. Lo poco que dejas. La chispa encendida.
Te quise y no lo niego. Pero eso fue en un pasado.

Y al final, la realidad ganó.

Te conocía mas mi imaginación que mis sentidos, me enamore de una idea no de una realidad.
La obsesión por la ilusión de no estar tan encerrada en los niveles del amor (del cual yo no conozco nada).
No es que viva para mí, pero aun no ha habido nadie que atormente mi pasión hasta dejarme sin aire.
Que apacigüe mi dolor por el cansancio de buscarte.
Que impaciente la adicción al besar y ser besada.
Que reviente la acción de querer y ser querida.
Si no serás vos quien pueda extasiarme, seguiré buscando quien me quiera y quien me deje quererle. Es fácil.

Dicen..

Dicen que recordar es vivir...
Un amor grande se debe recordar con amor y ternura y si ese recuerdo te hace vivir pues es un sentimiento hermoso. Una razón para vivir y ser feliz.
No todo se puede tener, ni nada dura para siempre...
Todo está en seguir hacia adelante y liberar el alma para volver a empezar o quedarse para siempre mirando hacia atrás...Todo está en nosotros y en lo que somos capaces de hacer, pero se ama y se ama bien, con libertad o se queda en el gran monumento de amor para siempre.
Y mis días se van deslizando suavemente, pensando en tus besos, tu amor eternamente. La maravilla de tenerte me llena de ilusiones, es como escuchar el trinar de mil gorriones.
Pero no estás conmigo. Te siento tan distante. Este amor es tan triste, anhelante. Quisiera abrazarte, entregarte mil caricias de esas que te llenan los poros y no son ficticias.
La luz de tus ojos es cual faro en mi camino, voy perdida en la vida si tu no estás conmigo, porque necesito tenerte a quí mi amor, no sabes cuanto anhelo tu presencia...
Porque hoy, me duele como nunca tu ausencia.