Te miro.
Y tu solo estás ahí. Viéndome incendiarme.
Pero, está bien. Porque me gusta la forma en que duele.
Estás ahí. Escuchándome llorar.
Y está bien, porque amo la manera en que mientes.
No puedo explicar lo que realmente es.
Puedo intentar decirte que se siente. Como quema.
Sin poder respirar. Seguir peleando contra lo imposible.
Te estoy dejando.
No, no lo harás. Me dices.
Y aquí vamos otra vez.
Cuando todo va bien. Soy Superman, con el viento en su espalda.
Pero cuando las cosas se ponen negras.
Me pregunto, quien sos? Ni siquiera conozco tu nombre.
Puse mis manos en vos, y nunca mas lo volvería a hacer.
Supongo que no conozco mi propia fuerza.
Alguna vez, amaste tanto a alguien, que no podías respirar?
Juraste que nunca lo golpearías; nunca harías nada por lastimarlo.
Ahora están cara a cara tirando veneno en sus palabras cuando las escupen.
Así que dicen que lo mejor es que cada uno siga su camino
Supongo que no te conocen porque eso fue ayer
Ayer ha terminado; es un día diferente
Suena como canciones rotas sonando otra vez, pero se lo prometiste
La próxima vez que te resistas
No tendrás otra oportunidad
La vida no es un juego de Nintendo
Pero mentiste otra vez
Ahora te toca mirarlo salir por la ventana
Supongo que por eso la llaman ventana del dolor.
viernes, 15 de julio de 2011
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